La refundación de Jalisco y sus implicaciones fiscales

El V Coloquio de Invierno de la Red de Políticas Públicas se celebró el 6, 7 y 8 de marzo pasado. Dentro de este evento se presentaron cinco paneles, entre ellos estuvo el nombrado “Las relaciones entre el Gobierno del Estado de Jalisco y la Federación”, en el que participo el Dr. Martín G. Romero Morett, Jefe del Departamento de Economía.

En este panel se habló de que el Gobierno actual de Jalisco ha planteado, desde su primer día en función, la refundación del estado. Esto conlleva cambios políticos no sólo a este nivel, sino a nivel federal y nivel local. El Dr. Romero comenzó explicando las implicaciones de una refundación en un estado como Jalisco y, además, bajo el funcionamiento de un país que se dice federalista.

Un país federalista se entiende bajo el principio de que cada nivel de gobierno posee cierto nivel de autoridad y “no puede estar encima de otro en lo que a cada uno le es de suyo propio”. La refundación entre las relaciones del gobierno de Jalisco y la Federación tiene implicaciones de distintas índoles, sin embargo, en el panel, por falta de tiempo se nombraron solo las implicaciones fiscales.

Se presentaron 6 implicaciones: 1) La redistribución de las fuentes de ingresos entre la Federación y la entidad federativa a favor de esta última; 2) Un posible aumento de fuentes de ingreso estatales; 3) Un aumento de los porcentajes que se cobran de las fuentes estatales actuales y nuevas y una disminución de las federales; 4) Una redefinición de las funciones y competencias de cada nivel de gobierno; 5) Una Refundación de la actual Ley de Coordinación Fiscal implicaría el aumento del 20% de la recaudación federal participable y; 6) Una nueva constitución estatal debe fijar las bases de la colaboración con la Federación en materia fiscal.

Es importante entender y analizar estas implicaciones pues, con ellas, podremos visualizar las acciones realizadas por los distintos niveles de gobierno, y cuáles de ellas corresponden a dichos niveles.

El Dr. Martin Romero explicó que México ha desarrollado un sistema centralista. No obstante, hay factores que competen y pueden ser resueltos de mejor manera por el sistema estatal. En México, es de suma importancia tomar en cuenta esa afirmación porque es un país intercultural, en el que el sistema federal se puede ver rebasado por la cantidad de problemáticas que existen en los dos niveles restantes (estatal y municipal).

En el caso de la Universidad, el Dr. Romero comentó que debería ser un asunto del gobierno de Jalisco, pues las necesidades de un sistema universitario, al igual que de otros asuntos públicos, puede ser mejor atendido por lo estatal más que lo federal. Puso como ejemplo a Estados Unidos, donde, desde hace unas décadas, la educación es un asunto estatal, pues cada estado asigna presupuestos y diseña programas que se ajusten a las necesidades de las personas. Por ello, concluye que la educación tiene pertinencia local para responder a las demandas locales.

Las implicaciones de la refundación se pueden ejecutar dependiendo de los posibles escenarios que se puedan presentar. Por ejemplo, en el caso de la seguridad local, sería más pertinente que el gobierno municipal se encargara de ella, ya que es necesario que los agentes de seguridad se acerquen a la gente y generen confianza. El caso contrario sería la guardia nacional, que solo entorpecería procesos que competen a un nivel diferente de gobierno y además, que se desarrollaría muy lejos de la ciudadanía, es decir, no generaría esta confianza que un policía local lograría.

Para generar la refundación desde el eje federalista debe de existir un beneficio mutuo entre los distintos niveles de gobierno y la ciudadanía. El Dr. Romero Morett explicó que el gobierno federal tiene una fórmula para asignar presupuesto a los estados de la República. Esta fórmula toma en cuenta el PIB de cada estado, su población y sus actividades económicas.

En este sentido, Jalisco se ve favorecido por el presupuesto federal que va destinado a obra y servicios públicos. Con el presupuesto estatal se generó la Línea 3 del tren ligero y, a pesar de que ha recibido dinero federal, esta obra no es de pertinencia nacional, pues el presupuesto federal debe destinarse a proyectos que sean transversales a los estados. Aunque en algunas ocasiones, el presupuesto federal, por contar con tantos recursos, destina dinero a proyectos estatales que necesitan ser puestos en marcha, como el caso de la Línea 3.

Finalmente, el Dr. Martín Romero mencionó que con los cambios políticos actuales puede generarse una posible reorganización de los recursos federales, estatales y municipales, y con ello, beneficiar a las entidades federativas y los programas sociales que merecen más atención. Además, podría darse la situación en la que los estados y la federación sean vistos como una sinergia y así evitar tareas inconclusas o concentración de tareas en ciertos espacios.

Por Abi López
Fotografía: Israel Palomeque